Una imagen vale más que mil palabras, pero una buena fotografía de producto puede valer aún más para tu negocio. Las imágenes de los productos influyen mucho en las decisiones de compra. A diferencia de las tiendas físicas donde los clientes pueden ver y tocar los productos que van a comprar, los clientes de una página de ecommerce dependen de la información y las fotografías que hay del producto para tomar su decisión de compra.
En este artículo te ofrecemos consejos esenciales sobre cómo tomar fotos de productos. Descubre cómo crear una tienda online que refleje tu marca de la mejor manera posible.
Equipo esencial para la fotografía de productos
Lo primero es lo primero. Para producir imágenes de calidad, hay que tener a mano el equipo adecuado. Para empezar, no hace falta que tengas una cámara DSLR cara. Bastará con el equipamiento básico:
Un smartphone: las generaciones más recientes de smartphones tienen excelentes capacidades fotográficas. No sólo están equipados con un hardware que te permitirá tomar fotografías de gran calidad y detalle, sino que los teléfonos más nuevos tienen montones de funciones que te ayudarán a optimizar tus imágenes. Para maximizar la calidad, dedica algo de tiempo a conocer las funciones de tu teléfono, incluidos los controles manuales. También puedes invertir en una cámara y lentes económicos que te ayuden a capturar tus productos en todo su esplendor.
Un trípode: un trípode garantiza que la cámara esté totalmente nivelada y puede colocarse a una altura y ángulo precisos para que todas las imágenes sean uniformes. Una vez colocada la cámara en el trípode, puedes utilizar un cronómetro o un control remoto (si lo tienes) para tomar fotos sin mover nada accidentalmente.
Una fuente de luz: la iluminación es otro elemento clave para el éxito de las fotos de productos. Si bien la luz natural funciona en algunas circunstancias, este tipo de iluminación puede cambiar a lo largo de una sesión, por lo que no siempre es óptima para tomar fotos que requieren uniformidad y detalle. Aunque puedes invertir en luces y flashes de calidad profesional, para empezar, las luces normales pueden funcionar. Si el reflejo y las sombras son demasiado fuertes, suaviza la luz con un difusor como una sábana blanca, papel o bolsas de basura blancas. Eso sí, asegúrate de que los difusores de luz que utilices no sean inflamables.
Un fondo tipo “sweep”: un fondo curvo o “sweep” es un fondo limpio y consistente, que elimina cualquier distracción visual. Elimina la línea entre la mesa y la pared y evita que captures accidentalmente cualquier defecto del fondo que no hayas notado a simple vista. Se puede hacer un fondo sweep con un rollo grande de papel, un trozo de cartulina o con una tela. Puedes fijar la parte superior de tu fondo a un marco específico, a la pared, al respaldo de una silla o a la parte posterior de una caja de luz.
Una caja de luz (opcional): dependiendo del tamaño de los productos, es posible que te resulte conveniente colocarlos en una caja de luz (también conocida como carpa de luz, macroestudio fotográfico o cubo de luz) para asegurarte de que queden bien colocados entre las fuentes de luz. Las cajas de luz incorporan pantallas para difundir la luz y reducir las sombras. Hay un montón de tutoriales en Internet sobre cómo hacer cajas de luz de bajo costo, o puedes comprar una en una tienda de material fotográfico.
Maniquíes, soportes o estantes (opcionales): todos ellos sirven como elementos de soporte fijos para ayudarte a exponer tus productos con nitidez. Utiliza cinta adhesiva de doble cara o un poco de pegamento para mantener los productos en su sitio cuando sea necesario.
Software de edición fotográfica: el software como Adobe Lightroom y Adobe Photoshop puede ayudar a perfeccionar aún más tus imágenes, dándote acceso a una amplia gama de efectos, filtros y funciones gráficas. Dicho esto, puede que no necesites todas esas funciones de edición para tu trabajo. Aprovecha otras opciones (como el editor de fotos integrado de Wix, disponible para todos los usuarios de Wix) antes de gastar un dineral. Consulta también nuestra lista completa de los mejores editores de fotos gratis.
Cómo tomar fotos de productos de alta calidad
1. Comprende el panorama general
Saber cómo hacer una buena foto y equiparse con las herramientas necesarias son pasos previos esenciales, pero hay otro paso crucial que hay que dar antes de tomar fotos: desarrollar una estrategia global de fotografía de productos.
Establecer estándares te ayudará a garantizar la calidad y la uniformidad, mientras que pensar en todos los posibles usos de las imágenes evita la necesidad de volver atrás por falta de planificación. Especialmente si contratas modelos o ayudantes en una producción fotográfica, es esencial contar con un plan eficaz para la sesión que esté basado en tus necesidades estratégicas, para que logres mantener los costos bajo control. Preguntas a considerar:
¿Cómo personifican mi marca estas imágenes? Las fotografías de productos pueden comunicar la identidad de tu marca de muchas maneras. Piensa en la sensación que quieres evocar con cada foto y qué combinaciones de colores, fondos o accesorios pueden ayudarte a conseguirlo.
¿Qué es lo que no puede faltar en ninguna foto? La categoría de tu producto y tu público pueden determinar qué tipos de fotos son más importantes. Por ejemplo, si vendes calzado deportivo a corredores especializados, es probable que quieras hacer primeros planos de las suelas y las plantillas ortopédicas, que tanto interesan a los corredores. Elaborar una lista de imágenes para cada producto genera confianza: los compradores saben que pueden encontrar información vital en cada conjunto de fotografías.
¿A qué estándares de imagen debo prestar atención? Si bien la expresión creativa de la identidad de marca es una prioridad, también es importante que las fotos sean lo suficientemente versátiles y que sirvan para cada canal y oportunidad de marketing. Piensa en cómo funcionarán tus fotos en celulares, en plataformas de ventas de terceros (cada uno con sus propios requisitos de imagen) y en distintos medios (por ejemplo, si el medio es impreso o digital).
2. Crea una lista de tomas
Teniendo en cuenta las consideraciones anteriores, elabora una lista de tomas. Como su nombre indica, se trata de una lista de todas las fotos que quieres tomar, con detalles sobre los distintos ángulos, la disposición de los productos y la configuración que quieres utilizar.
Especifica la intención de cada foto. Por ejemplo, si estás fotografiando cerámica hecha a mano, indica que determinadas tomas están pensadas para mostrar los detalles artesanales en el asa de tu tetera de barro. Considera también los distintos tipos de fotos que puedes tomar:
Fotos de estudio: son las que más se utilizan como foto de portada porque se centran en el producto. Por ejemplo, Festela muestra claramente sus productos sobre un fondo liso de color homogéneo.
Fotos de estilo de vida: muestran productos en situaciones reales. En lugar de centrarse en los detalles del producto, estas imágenes permiten a los clientes imaginarse disfrutando el producto. También pueden ayudar a los clientes a calcular la talla, el ajuste y el uso del producto. Así es como Verde Menta utiliza fotos de estilo de vida, para mostrar el uso cotidiano del producto que te mostramos más arriba.
Foto de primeros planos: la macrofotografía es una técnica que permite capturar primeros planos muy detallados de un producto al enfocar objetos que están muy cerca del lente. Es ideal para resaltar productos intrincados. En el siguiente ejemplo, Peruke muestra un primer plano nítido de un ukelele.
Foto de grupo: muestra varios artículos complementarios. Las fotos de grupo se pueden utilizar para mostrar distintas opciones de tamaño de un solo artículo, o el surtido completo de artículos incluidos en un kit o colección de productos. La Purita utiliza una atractiva foto de grupo para generar interés en sus gama de productos.
Foto demostrativa: similar a una foto de estilo de vida, las fotos demostrativas muestran tu producto en uso. No obstante, su finalidad es mostrar cómo utilizarlo correctamente. Por ejemplo, Festela utiliza fotografías para dar mas detalles de sus productos y ayudar a sus visitantes a encontrar la talla ideal.
3. Domina la iluminación
Ningún equipo, por más sofisticado que sea, puede salvar tus imágenes si están mal iluminadas. Por lo tanto, tómate tu tiempo para preparar el lugar para la sesión. Puede ser una habitación con muchas ventanas o un sitio de tu espacio de trabajo donde puedas controlar fácilmente la iluminación. Ten en cuenta que puedes utilizar dos tipos principales de iluminación:
Iluminación suave: la iluminación suave crea un delicado efecto de halo que ilumina el objeto desde todos los ángulos. Este método iluminará todos los detalles del producto y eliminará las sombras duras que pueden oscurecer los detalles y los bordes del producto. Esto es especialmente importante cuando se fotografían objetos tridimensionales.
Iluminación dura: la iluminación dura añade más contraste entre la luz y las sombras. Con luz dura, las sombras tienen bordes más duros y mayor definición. Este método es ideal para añadir dramatismo a la fotografía y, en algunos casos, puede ser útil para tomar fotos de productos activos.
La iluminación suave es el tipo de iluminación más utilizado en la fotografía de productos. Esto, como ya se ha dicho, puede conseguirse con difusores, reflectores o una caja de luz.
Si utilizas luz natural, coloca el producto cerca de la ventana para conseguir una iluminación más suave. Apaga toda la iluminación artificial de la habitación para evitar sombras y colores que compitan entre sí.
4. Juega con los ángulos
A la hora de fotografiar tus productos, conseguir el ángulo adecuado puede tener enormes repercusiones en la forma en que el comprador percibirá el artículo. Además, querrás mostrar tus productos desde varios ángulos, para compensar así el hecho de que los compradores no puedan observar tus productos físicos por sí mismos.
Navy Crew, se preocupa por mostrar sus productos desde todos los ángulos: frontal, lateral, trasero, vista aérea, de lejos y de cerca.
5. Elige bien el fondo
Está de más decir que hay que elegir un fondo que realce (y no reste valor) al producto en sí. Una apuesta segura es tomar tus fotos sobre un fondo limpio y blanco. Pero algunos productos destacan más o ayudan a realzar tu marca si se fotografían sobre un fondo oscuro.
Si tu marca es alegre, puedes optar por utilizar muchos colores vivos. Si prefieres el glamour retro, puedes optar por el blanco y negro o los tonos sepia. El color del fondo puede evocar diversas emociones, así que intenta pensar también en tu público objetivo. Un fondo adecuado puede hacer que tus productos parezcan caros, mientras que el fondo incorrecto puede hacer que parezcan de baja calidad.
Alternativamente, algunas fotos brillarán sobre un fondo que sea más dinámico. Por ejemplo, Matenado.mx exhibe su mate delante de una libreria elegante estilo vintage. Esto da calidez al conjunto de la foto, pero como el fondo está difuminado y oscurecido, el ojo sigue yendo primero hacia el producto.
6. Juega con la composición
La composición es la colocación o disposición de elementos visuales de manera que se complementen entre sí. Si vas a fotografiar varios objetos juntos, vuelve a organizarlos tantas veces como puedas hasta encontrar la forma que encaje mejor. A veces, durante este proceso, puedes darte cuenta de que sería mejor fotografiar los artículos por separado.
Considera la posibilidad de utilizar accesorios o elementos decorativos para realzar las cualidades del producto o incluso los valores de tu marca. Las plantas verdes pueden animar la foto de un producto alimenticio y darle un toque de frescura. O si vendes jabones fabricados de manera sostenible, puedes exponer tus productos con plantas de fondo en una jabonera de madera, para mostrar que tu marca está alineada con la naturaleza.
Si vendes productos pequeños o que no se mantienen en pie, utiliza un soporte para sostener el producto. Por ejemplo, coloca un par de pendientes en un exhibidor, o coloca una caja detrás de los libros para mantenerlos parados. Aunque puedes intentar minimizar el impacto que esto tiene en tu imagen, también puedes sacarle provecho y dejar que el soporte añada un elemento interesante a tus fotos de productos.
7. Agrega un texto descriptivo
Una vez que tengas tus imágenes, ya puedes subirlas a tu tienda online, una excelente manera de generar dinero por internet.
Agregar una atractiva descripción del producto es tan importante como la propia imagen. Aunque pueda parecerte obvio, describir las dimensiones, el material y el peso de tu producto es crucial en el proceso de compra. Añadir texto también puede ayudar a reducir las devoluciones y los reclamos.
El texto debe ser breve y conciso. No sobrecargues tus páginas de productos con información innecesaria que pueda desviar la atención del producto. Si necesitas un poco de inspiración, fíjate en las grandes empresas con un aspecto similar al de tu tienda y observa cómo diseñan su página de productos.
No olvides agregar texto a todas tus imágenes. Dado que Google no puede ver realmente de qué trata la imagen, es necesario explicar qué es la imagen con texto alternativo. Debe ser una descripción del producto de dos a tres palabras. Es una buena idea utilizar palabras clave optimizadas para motores de búsqueda (SEO) al escribir el texto alternativo, para que tu página aparezca en los motores de búsqueda.
8. Ten en cuenta el tamaño de los archivos de imagen
La velocidad de carga de tus páginas es muy importante para que los usuarios tengan una buena experiencia y para que tu página tenga un buen posicionamiento en los motores de búsqueda. A menudo, los archivos grandes son los responsables de que la página cargue lentamente. Por eso, es recomendable cambiar el tamaño de las imágenes antes de subirlas a la página.
Para hacerlo, trata de ajustar la imagen al ancho de la pantalla. Puedes saber cuál es ese ancho haciendo clic derecho en cualquier imagen de producto de tu página, seleccionando "Inspeccionar" y viendo las dimensiones en el panel "Estilos".
Utiliza herramientas como la de Wix para cambiar el tamaño de la imagen. Además, comprimir las imágenes puede ayudar a reducir aún más el tamaño del archivo. Puedes usar herramientas como TinyJPG, que reducen el tamaño del archivo sin afectar demasiado la calidad de la imagen.
9. Aprovecha el contenido generado por usuarios
Los clientes quieren verse representados por las marcas que compran y, cada vez más, eso significa seleccionar modelos que reflejen públicos diversos.
Mejor aún, considera cómo puedes incorporar contenido generado por usuarios (CGU) en tu página web, no únicamente en tus redes sociales. Así mostrarás tus productos no solo en diversos entornos reales, sino que a la vez demostrarás tu compromiso en dar prioridad a la satisfacción de tus clientes.
10. Aprovecha otras herramientas visuales
Las fotos fijas tienen sus ventajas: son fáciles de ver para los compradores y no necesitan mucho ancho de banda de Internet. Pero a medida que surgen nuevas herramientas visuales, tu estrategia fotográfica debe adaptarse e incorporar las nuevas ofertas.
Los videos, por ejemplo, permiten incorporar sonido y movimiento a la experiencia de compra en línea. Desde demostraciones prácticas hasta eventos de compras en directo, los videos pueden ayudar a generar más ventas y atraer a compradores con distintas preferencias.
Captura videos y fotos durante las sesiones fotográficas para catálogos y obtén imágenes que puedas reutilizar en varios canales. Por ejemplo, Notebook Stacy muestra el interior de sus planners por medio de un video interactivo.
Considera también tecnologías emergentes como la realidad aumentada (RA). Más de 100 millones de consumidores ya están comprando con RA, según Snapchat, que informa un aumento del 94 % en las tasas de conversión gracias a experiencias de compra impulsadas por RA. Plataformas como Wix eCommerce admiten fotos de 360 grados, lo que puede ayudarte a aprovechar esta tendencia.
Conclusión
La fotografía de productos para comercio electrónico tiene un impacto significativo en las decisiones de compra de los consumidores, pero no tiene por qué hacer mella en tu presupuesto. Con una estrategia cuidadosa y unas cuantas compras de equipos esenciales, puedes crear una galería de fotos que transmitan la información clave sobre tu producto de manera eficaz, creen identidad de marca y generen ventas.
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